El poder del uso de herramientas creativas – Parte I
Alguna vez te pasó que:
Notás que tu cliente/paciente está estancado…
No sabés cómo ayudar a tu cliente/paciente a romper un círculo cerrado…
Tu cliente/paciente mantiene un discurso muy racional y vos sabés que es puramente defensivo…
Percibís que el proceso con tu cliente/paciente está estancada…
Necesitás nuevas ideas para atender tus clientes/pacientes/grupos…
Sentís que necesitás nuevas ideas creativas…
Es cuando podés apelar a nuevas herramientas que destraben los procesos que te preocupan, cuando podés ayudarte y enriquecerte de forma creativa que aporte a tu trabajo.
El impacto de la introducción de algún tipo de estímulo creativo es que creará nuevas asociaciones que pueden conducir a nuevas soluciones o percepciones.
La riqueza de las herramientas creativas se centra en que permiten que el paciente/consultante se conecte con partes de su cerebro que procesan la información de manera diferente, generalmente denominado "cerebro derecho", posibilitando diálogos internos que luego involucra al “cerebro izquierdo” y de esta manera la persona integra nuevas miradas, nuevos puntos de vista que abren nuevos caminos de descubrimiento y acción.
Los enfoques cognitivos, el lenguaje verbal y el pensamiento lineal desempeñan un papel importante, pero no son suficientes.
Los procesos del hemisferio derecho acceden a nuestro conocimiento de manera diferente. Aprovechando la capacidad de la mente para hacer asociaciones, creamos nuevos significados y nuevas ideas al unir cosas que antes no estaban relacionadas. El resultado es que sale a la superficie más información que cuando usamos solo procesos verbales, del hemisferio izquierdo.